
¿Es posible que ya hayas escuchado alguna anécdota acerca de una persona que deja una propina muy considerada solo por ser agradecido con quien le otorgó un buen servicio o porque se enteró de su triste historia?, pues algo similar le sucedió a Cayla Chandara, una mujer con dificultades económicas que tenía que laborar en dos empleos a la vez con la esperanza de que algún día poder volver a estudiar, era una persona luchadora y muy fajadora, pero nunca imaginó recibir de esta pareja, 400 dólares como propina por una comida de 200, pero esta historia apenas se pone interesante.
En esta ocasión Cayla se topó a una pareja de australianos y mientras les atendía en su mesa en el restaurante Noi Thai en Waikiki, ellos le preguntaron sobre su vida, a lo que ella respondió que había arribado a la ciudad con la meta de estudiar pero que gracias a las deudas que cargaba por el momento le resultaba inviable continuar sus estudios. El costo de la vida en la ciudad junto con la matricula de los estudios, resultaba una carga económica que no podía llevar.
No era la primera vez que los clientes habían sido generosos con la propina pero en esa ocasión sentía que debía agradecerles personalmente, durante la conversación la pareja declaró a Cayla donde se hospedaban, así que después de su turno en el trabajo, la joven se dirigió a buscarlos, y les entregó un ramo de flores y una tarjeta como agradecimiento por la esplendido acto que habían hecho por ella.
Pero como si fuera poco, eso no fue todo, al día siguiente la pareja se topó de nuevo en el restaurante con Cayla, y tras una nueva conversación le propusieron pagarle los gastos académicos, refiriéndose a un monto de 10.000 dólares.
Ella como es de esperarse, no se sentía del todo cómoda aceptando la propuesta de la pareja. Pero la pareja estaba determinada y no iban a permitir que Cayla rechazara tal oportunidad, así que ella acabó cediendo y se propuso a ser una mejor persona cada día.
Por solicitud de los héroes de esta historia, sus identidades se conservan en el anonimato. Pero su historia se ha vuelto viral.
A continuación te mostramos un vídeo de esta historia: